Mientras el país se hunde aún más en la crisis se seguridad ciudadana, sociopolítica y económica que motiva protestas populares que incluyen huelgas, saqueos e incendio de locales de instituciones públicas para, de esa forma, exigir la dimisión del Primer Ministro de facto, Ariel Henry, cientos de hombres y mujeres fieles a sus fiestas de carnaval, desfilaron el domingo pasado en el Campo de Marte, la más extensa y popular plaza de Puerto Príncipe. Fieles a esta tradición, bailaron, cantaron y rieron despejados de todo tipo de tormentos. A la vez, los estudiantes de la Facultad de Derecho y Ciencias Económicas (FDSE, en francés) de la Universidad del Estado de Haití (UEH) levantaron barricadas en llamas en el Carrefour, una zona a otra facultad, a la de Etnología, para protestar contra la inseguridad.
Por Célou Flécher
Puerto Príncipe, (LFH), 11 de febrero de 2023. _Las calles del Campo de Marte, en Puerto Príncipe, capital de Haití, son desde las 10 horas de este domingo, aproximadamente, escenario de desfiles artísticos con motivo del último “Domingo de Carnaval”.
Disfrazados de la causa de la cultura haitiana, los bailarines, bajo un sol abrasador, desfilan en fila india, al ritmo de los merengues de la carroza de DJ Constant. En el Campo de Marte, el escenario está bien preparado para acoger a los participantes en estas fiestas.
Sin que haya ningún anuncio oficial por parte del Gobierno haitiano o al menos de las autoridades municipales, Puerto Príncipe está lista para bailar su carnaval pese a la situación que vive el país.
Con la construcción de gradas, en particular la que representa al Ayuntamiento, la formación de ambulancias y profesionales sanitarios para socorrer a posibles víctimas y de los bomberos en caso de incendio, el Campo de Marte parece recuperar su sonrisa de antaño.
Durante aproximadamente tres semanas, del 29 de enero al 11 de febrero de 2024, Haití se ha visto afectado por huelgas consecutivas iniciadas por asociaciones sindicales que presionan al Gobierno haitiano para resolver la inseguridad que azota al país. La situación se ha agravado con los movimientos populares a través de los cuales el pueblo haitiano pide la salida del cargo del Primer Ministro de facto, Ariel Henry.
A pesar de los llamados a su dimisión, el jefe de Gobierno no cedió ante las protestas populares. Por eso, sigue aferrado a su cargo hasta que afronte los problemas de inseguridad y organice las próximas elecciones, afirmó, durante su discurso a la Nación el pasado 7 de febrero. Y es en este contexto de frágil crisis donde niños, jóvenes y adultos acuden al Campo de Marte para desahogarse.
Puerto Príncipe baila carnaval bajo las barricadas contra la inseguridad
En Puerto Príncipe, especialmente en Champ-de-Mars, no todos hablan el mismo idioma. Mientras un grupo de personas baila carnaval en el corazón de la Capital, otros protestan contra la inseguridad que azota al país, estos últimos son nada menos que estudiantes de la Facultad de Derecho y Ciencias Económicas (FDSE).
Cansados de los actos de bandidaje que dejaron nada menos que 806 personas muertas, heridas o secuestradas (según las Naciones Unidas), estos estudiantes levantaron barricadas y quemaron neumáticos en el Carrefour situado en los alrededores de dicha facultad. Dicen ser parte de este planteamiento para obligar a las autoridades de Gobierno a abordar el problema de inseguridad del que son víctimas todos los estratos sociales del país.
“No hay carnaval para los mártires, los sobrevivientes de la inseguridad generalizada que prevalece en el país. Quienes toman la decisión de organizar desfiles de carnaval en cualquier parte del país, así como los participantes en estas festividades, son cómplices de la situación actual que vive el país y en connivencia con las bandas que secuestran, violan y asesinan a nuestros compatriotas”, dijeron los instigadores del movimiento al periódico online Le Facteur Haití.
Suena un concierto de cartucho. ¡Reina el pánico! Mientras tanto, a la vez tienen lugar los bailes con movimiento de los cuerpos de manera sugerente, cantos, ingesta de alcohol y otras manifestaciones de alegría y gozo.
Si bien la presencia policial es muy constante en diferentes puntos fijos y en varias zonas estratégicas del Campo de Marte, por la noche se escuchan detonaciones de armas pesadas en los distritos vecinos, especialmente en Bél’Air.
Entonces, ¡el miedo nos invade y tememos lo peor!
